Climaterio masculino


En el hombre también existe un climaterio, pero éste es más sutil y lento, éstas características son fortalecidas por la negación masculina a aceptar su declinación viril. En esta etapa tanto el hombre como la mujer, pueden sentir que ya no tienen derecho al sexo ( sentimiento más frecuente en la mujer, que fue educada para reprimir los deseos sexuales). Este sentimiento es alimentado por la disminución de la potencia viril y el deseo sexual en la mujer). No debiera ser así, ya que el amor físico no es únicamente el coito, la falta de deseo en la mujer muchas veces es producto de prejuicios sociales o de una educación llena de tabúes con respecto al sexo. Algunas mujeres que ya han pasado el climaterio, por lo que dije anteriormente, piensan que no deben sentir deseos sexuales, entonces los reprime y se dedica a ser una abuela recatada y asexuada. Los sexólogos nos enseñan que la libido ( energía sexual), no termina a determinada edad, puede disminuir por condiciones físicas o emocionales. Pero para todo hay solución, hoy en día. Una alimentación sana, ejercicios físicos acorde a la edad, ocupaciones intelectuales gratificantes y una autoestima adecuada, pueden hacer maravillas al respecto. En el varón la situación es diferente, necesitan de la erección para un coito y esta capacidad declina con la edad, pero no olvidemos que en ellos es muy importante como factores perjudiciales, el alcoholismo y el tabaquismo; ambos producen disminución de la potencia viril a partir de los 40 años. ¡Señores! A dejar de beber y fumar en exceso si quieren conservar la potencia por más tiempo; pero si no lo hacen recuerden que el amor físico implica mucho más que el coito. Lamentablemente los adultos mayores reprimen manifestaciones de cariño con su pareja ( aún en privado) porque la sociedad joven los acusa de ridículos. Las personas mayores merecen el respeto a su intimidad al igual que lo exigen los jóvenes, ya que éstos llegarán también a esa etapa. Elías Nandino, escribió a los 82 años, en su libro “Erotismo al rojo blanco”: “Longevidad maldita: ¿porqué si soy ceniza mi cerebro está en brama y su lujuria cunde hasta las marchitas zonas de mi carne aniquilada? “Longevidad maldita: llamarada helada, tantálico averno de concupiscencia rezagada” “Toda belleza humana aún me despierta la esperanza de gozarla, y vivo y me desvivo eyaculando sólo orgasmos de lágrimas”

No hay comentarios:

Publicar un comentario